Cuando desarrollas tu capacidad de utilizar el lenguaje de una cierta manera para hacer un uso eficiente del mismo (y así conseguir acercarte más a tus objetivos), combinadas con herramientas para conectar con la emoción de la gente, junto con el desarrollo de ciertos hábitos para ganar la confianza de las personas, con lo que mejora nuestra credibilidad, tu capacidad de persuadir, convencer o producir cambios en los demás aumenta.
En nuestra cultura occidental es fácil confundir la capacidad de persuasión con la manipulación de las personas. Tal como define la RAE, manipular es intervenir “con distorsión de la verdad o justicia”, lo cual implica connotaciones negativas. Incluso en la definición de persuasión, la RAE la define como “obligar a alguien con razones a creer o hacer algo”. Una vez más, con el término ‘obligar’, nos está implicando connotaciones negativas.
El enfoque que te queremos ofrecer en este artículo es que nadie puede ‘obligarte’ a realizar ningún cambio si tu no quieres, ni a nivel consciente ni inconsciente. A lo máximo que puede aspirar una persona, un anuncio, un mensaje, etc.. es a que te plantees ciertas ideas, que aceptes cierto razonamiento como válido, o a invitarte a que produzcas cierto cambio en ti, sea este que ordenes tu habitación, que consumas cierto producto, que modifiques alguna conducta, etc. Por muy estudiado, manipulado, distorsionado, o ajeno a la realidad que esté construido el mensaje (o la argumentación) para convencer a un mayor número de personas, la elección final siempre la tiene el receptor del mensaje.
Es por ello que en Human Abilities enfocamos los cursos de Persuasión y Argumentación para que, por un lado, el receptor del mensaje fortalezca el control de sus elecciones aprendiendo por el estudio del origen del razonamiento, el control de las emociones y las técnicas de argumentación, y por otro lado, que el practicante de estas herramientas de persuasión tenga en cuenta las necesidades y objetivos de sus interlocutores para obtener un beneficio mutuo, ya que es la forma de conectar con las personas de un modo más eficaz, humano y duradero, (o desde el punto de vista del receptor, que elija conectar contigo o con tu idea porque se vea satisfecho con ella de alguna manera).
En Human Abilities investigamos, desarrollamos y difundimos herramientas como esta para hacer que la gente esté más preparada y con más recursos de afrontar los cambios actuales. Huir de estas herramientas justificándose en el conflicto interior que pueda surgir por la connotación negativa que se ha dado a estos términos en nuestra cultura, sería actuar de la misma forma en que se nos muestra la imagen de la avestruz cuando se siente en peligro, escondiendo su cabeza bajo tierra, pensando que así el peligro desaparece.
Raúl Soldado
Formador de Human Abilities